Yo duermo muy poco. Desde joven. Y todavía tengo mucho que hacer diariamente y mucho que pensar para dormir. Pero en estos días de Semana Santa con este País obligadamente paralizado, encontré tiempo para dormir ratos y vaguear un poco.
Y entonces soñé….Yo sabía que aquello era un sueño, uno nunca se aleja lo suficiente de su consciente. Y después que comenzó me aferré a él, no quería moverme, perder lo que estaba viendo. Primero fue como un montón de gente abrazándose, gritando, saltando.
Nadie lo decía pero tenía que ver con Chávez. Y por fin vi la cara de Chávez, no sé donde estaba ni donde estaba yo, pero muchas caras me miraban con la misma expresión de incredulidad. El rostro rollizo tenía una expresión inconfundible y extraña porque no tenía esa contenida chocancia ni siquiera una mínima petulancia que nunca falta en é y uno rechaza de inmediato. La voz no estaba engolada, más bien suave, y serena. Y uno, que en la realidad y bien despierta lo conoce, en el sueño sentía que algo le pasaba, que estaba por suceder algo inimaginable. Yo no quería moverme…tras esa imagen estaba mi consciente forzando mi mente a no soltar aquello que presentía.
Fueron apareciendo tras él Diosdado, Cilia, la fiscal, la Morales, se congregaban silenciosos. Y Chávez comenzó a hablar: dejaba el poder. Así lo dijo. Los largos siete días le habían hecho comprender entre viaje y viaje y a pesar de los abrazos y alfombras, que él no podía con los problemas de Venezuela, que había hecho todo lo imposible para que no faltara el agua, para que la obscuridad no ayudara la perversa inseguridad, pero no había podido. Que había tenido una visión aterradora de lo que le pasaría al País y él no quería ser responsable de ese drama . Como en la realidad, aquel hombre negaba su fracaso y escaparía ileso pidiendo perdón. Que él y su gabinete, los funcionarios de confianza, ya sabían de su decisión y abandonarían igualmente el gobierno. Que el pueblo sabía que daría su vida por el….pero no podía. Y por ello esperaba que esta renuncia pública ante Venezuela y el mundo se aceptara como un gesto de responsabilidad y se dieran garantías para su salida a Cuba y la libertad a los suyos de viajar donde desearan. Me desperté con el corazón a millón. Abracé a Daniela, mi perra Springer Spaniel que duerme a mi lado. Y volví a dormirme, el sueño parecía invadirme sin permiso. Y volví al momento que acababa de dejar atrás. Ya no estaba Chávez. Pero las calles estaban llenas de gente gritando….
Yo me uní al grupo que iba al Helicoide a sacar los presos. Bony lloraba, sus hijos Iván e Ivana, ya adolescentes, se abrazaban uno al otro. En las calles los soldados se mezclaban con la gente, algunos tiraban al aire sus camisas de uniforme. Oswaldo fue el primero en aparecer. El abrazo con su hijo alcanzó para mí. El nombre de Antonio Ledezma y Enrique Mendoza tranquilizaban mi angustia. Brinqué otra vez. Me levanté. Era muy fuerte todo lo que estaba soñando….tenía un nudo en la garganta, me temblaban las piernas.
Salí afuera seguida de mis perros….Miré el cielo …..Debía darle gracias a Dios por ese sueño…..?
Había construido el sueño que quería mi mente sumida en esta angustia constante, en esta rabia que a veces se hace incontenible, en esta impotencia que me abruma? Puede ser….yo no sé nada de sueños, de sus significados. Pero quién sabe?
Chelique dice en la Cantata Bolivariana que “América es una balsa encallada en un sueño”. Entonces…..?
Quien puede detener el soñar para hacer realidad la libertad?
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Amen!!!! que se cumpla pronto!!!
ResponderEliminarEso sería volver a la libertad, y es lo que merecemos.
ResponderEliminarQ bonito tu sueño me emociona y asi mismo sera Men
ResponderEliminarIsa dobles ciempre eres lo mas grande de este pais,Honesta, Clara,Duice, Cariñosa, Amable, Linda,. Bueno chica te amamos mucho, oirte o leete es como ver a DIOS, larga vida y si quieres un pedazo de cada uno de los Venezolanos que te amamos te la damos con amor, que dios te bendiga
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