Nos toca enfrentar el poder más perverso y absoluto.

Marzo 5- 2013- 4:25 pm

 

Ha muerto el dictador y el llanto fácil

surca el rostro de gente adolorida,

ha muerto el dictador, ha muerto Chávez,

y lo lloran a coro presidentes

que en vida lo chulearon, lo vivieron,

quitándole el dinero a Venezuela….

 

Ha muerto el dictador y en la isla prisionera

Fidel Castro y  Raúl, con  Ramiro Valdés

también lloran la muerte del mecenas

y enfrentan la derrota, el hambre y las penurias

que les sobrevendrán  en plazo breve…

 

Ha muerto el dictador y las campanas

que debieron sonar a todo estruendo

se quedaron calladas, en silencio,

en un silencio cómplice, silencio de la Iglesia,

silencio amanecido en mitad del silencio….

 

Ha muerto el hombre odio, el hombre crimen,

el hombre división de todo un pueblo,

el hombre que ordenaba la prisión para siempre

de la gente inocente,

el hombre que en decretos te quitaba el aliento

y con solo una orden te convertía en recuerdos.

 

Ha muerto ese pedazo de nuestra Venezuela

que nos llenó de luto, de sangre y de miseria,

que nos mató por dentro y nos quitó lo nuestro,

 que humillo el gentilicio de todo nuestro suelo

y nos cubrió de estiércol desde arriba hasta el suelo…

 

Ha muerto y Venezuela, mi Venezuela cierta

permanece callada cual si estuviera muerta

acompañando el féretro y metiéndose adentro

cual viuda entristecida, como cualquier doliente,

como si le doliera  que al fin  se hubiera muerto

el que la castigaba desde adentro hasta afuera.

 

Ha muerto el despotismo y la burla y lo cierto

de no poder decir lo que llevas por dentro,

lo que a ti te humillaba y hasta te daba miedo,

lo que te cambio el rumbo en mitad del aliento,

lo que nunca quisiste pero te lo impusieron,

lo que te arrebataron y lo que no te dieron…

 

Ha muerto aquel que vino a destrozar el huerto

a golpear las mañanas y  ennegrecer el cielo,

ha muerto la miseria, ha muerto el golpe fiero,

el grito a medianoche por todo lo que  duele,

 el rio crecido en trozos, repartido en silencios

y la luz apagada y el sol oscuro y negro,

ha muerto y ya tenemos, si queremos tenerlo,

todo lo que de pronto nos brinda el firmamento,

paz y amor, luz y cielo,  entre los hombres justos,

luz y amor, cielo y paz entre los hombres buenos….

 

Dios bendiga a mi Patria, Dios bendiga a mi tierra,

Dios bendiga  lo hermoso que nos diera el Eterno.

Dios bendiga lo grande, lo cierto, lo pequeño

que nos habían quitado, aquí en mi Venezuela

y Dios le dé al tirano, a ese dictadorzuelo,

el castigo infinito por lo que nos hiciera!!!

 

 

 

Anoche este muchacho que apenas nos acerca a la Venezuela de respeto y coraje, despertó el espíritu agobiado…y estamos otra vez en la lucha! 

 

Nos toca enfrentar el poder más  perverso y absoluto.

 

Pero aquí estamos  

 

¡Sin rendirnos!