viernes, 18 de junio de 2010

Ese cuentito de irse como maestro … ¿usted se lo cree?

Cuando aparece el caballito blanco, nada original, es la copia exacta de un video cubano de Silvio Rodríguez, ya uno pulsa el control para cambiar de canal o aprovecha para hacer algo pendiente.
No me pasa sólo a mí. Obviamente a casi todo el país sí. Según cifras, un escaso 3% de audiencia tienen las eternas cadenas que a estas alturas es lo que consiguen sin mucho esfuerzo, y esto ratifica que no todo está bien en esa mente revolucionaria.

Indiscutiblemente, porque no lo puede negar ni el más arrastrado chavista, los desórdenes mentales de esa personalidad ya comienzan a enseñar deterioros preocupantes. Y una dosis fuerte de perversidad.

Sólo así se explican las últimas reacciones … el envío de alimentos vencidos a Haití, la arremetida burlona, agraviante contra la Polar, Mendoza, los Zuloaga, los cañicultores, los productores, en fín, lo que se le ocurra en un alti bajo emocional. Las vulgaridades, los cinismos. Ya no haya qué hacer! Boxea, canta, baila, recita ¿Qué es eso de “vengan aquí tenemos flor” cuando se refiere a los hombres que ha manoseado con sus locuras y abusos de poder?

Pero lo que más indigna es esa incitación al odio, esa constante convocatoria a la diferencia de clases, ese veneno demencial. Hasta sus mismos “cómplices” como Lula, Cristina, Ortega, saben de sus desmanes y lo soportan porque es el “tonto útil” del mercado petrolero con su chequera pródiga. Esa contaminación con la juventud que aplaude los insultos, las vulgaridades, las amenazas. Esa cobardía que se esconde tras guardaespaldas goriloides cubanos. Ese presumir de valiente ante un pueblo que conoce bien esas evidencias , que sabe, porque sabe, como es de verdad.

El uniforme no puede cambiar esa debilidad que está adentro, en el hombre subordinado y lleno de rabia y venganza, gris, ese que yo conocí tras bastidores en una tarima de escenario encargado de organizar la utilería de las elecciones de reina de la academia militar, cambiándome el taburetito frente al micrófono. Ese terrible complejo de inferioridad que no puede controlar y es parte de esa personalidad diagnosticada por autoridades médicas. ¿Cómo va este personaje a permitir que le quiten ese poder? Así como ignoró la voluntad popular que rechazó la reforma que nos convertía en socialistas, así están trabajando para hacerlo otra vez. Comunas, reservistas, armas, antimisiles, gases…
Él no contempla perder el servilismo, los aplausos, las alfombras rojas, el tuteo con grandes personalidades, los micrófonos y cámaras, los lacayos, los uniformes y banderas, las botas y los chalecos., los saludos obedientes. Que la BBC lo entreviste con Oliver Stone sentadfo en su despacho como dicen…eso es lo suyo. Ese cuentito de irse como maestro cuando deje el poder… ¿usted se lo cree? Lo que los venezolanos tenemos que asumir es que como diagnostican, Hugo Chávez no cambiará y sus reglas de juego por lo tanto y como consecuencia, tampoco. Biologicamante no puede. Esto está en nuestras manos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu Comentario.

ISA DOBLES